lunes, 2 de julio de 2012

Karen Mace: la escritura como terapia


Hace poco pude conocer a Karen, una mujer australiana con una amplia sonrisa, llena de amor por la vida y por la gente. Al verla, nadie podría imaginar que sufrió una trágica pérdida de la que muchos no habrían podido salir.

Fue hace unos años cuando ella junto con su esposo e hijas vivían en Quito. Karen era enfermera y a más de su trabajo se ocupaba de varias tareas misioneras como enseñar estudios bíblicos, conducir un programa de radio y visitar la cárcel de mujeres. De hecho, su tercera hija nació durante su tiempo de servicio en el Hospital Vozandes-Shell en la selva amazónica.

Transcurría noviembre del 2003 cuando sucedió lo inimaginable. Sarah, la segunda hija del matrimonio e Iliana, la más pequeña, tomaban un baño en el departamento de la familia sin saber que la llama piloto del calefón no estaba funcionando bien. El gas lentamente las durmió.

Karen cuenta que a la terrible muerte de Ileana y Sarah se sumaron una serie de cosas que desafiaron su fe, por lo que le era cada vez más difícil comunicarse con Dios.

Tal vez nadie percibía lo mucho que luchaba en su interior hasta que, finalmente, en el año 2006, Karen tuvo la convicción de que el Señor le estaba enseñando nuevas maneras de procesar su dolor.

Fue allí que descubrió el uso terapéutico de la escritura, una excelente herramienta para desenredar conflictos profundos y descubrir propósitos. Karen relata con entusiasmo que, con la ayuda de Dios, las personas se pueden librar de viejas ataduras y de la opresión que las mantiene cautivas por años. Por esa razón se entregó a estudiar con esmero este método y lo encontró muy útil para hombres y mujeres.

Karen ahora es una terapeuta. Dedica mucho tiempo a ofrecer talleres y sesiones de consejería en la isla de Tasmania, su lugar de origen. Cree firmemente en el poder de Dios para sanar nuestras heridas y fortalecernos para enfrentar lo que venga, sabiendo que hay un propósito.

Quién mejor que ella, que sobrevivió a un dolor tan grande, para afirmarlo. Karen es un libro abierto.

 El en su blog en inglés "The Healing Place", se puede encontrar escritura terapéutica aplicada a varios temas.